CEB LUZ OSORIO CASCO

JUTICALPA

El CEB “Luz Osorio Casco” lleva ese nombre en honor a la maestra que laboró durante muchos años en el instituto “La Fraternidad” en el municipio de Juticalpa. Lamentablemente la maestra falleció a raíz de un cáncer.

Este centro educativo se inauguró el 25 de julio de 1974 como una respuesta a las necesidades educativas de la zona; ya que, a los niños y niñas de la comunidad, les resultaba muy lejos movilizarse al centro educativo existente.

El centro fue construido por la Corporación Municipal de Campamento, presidida por el Señor alcalde Cornelio Santos (QDDG). Comenzó funciones como un anexo de la escuela “Juan J. Castro”, laborando la maestra Erlinda Herrera Almendares y Priscila Bustillo Zelaya, atendiendo primero y segundo grado respectivamente.

El año siguiente (1975), la escuela logra su propio acuerdo como “Escuela Rural”, siendo la primera directora, la profesora Mayra Molina de Zambrano, y la subdirectora la maestra Danubia Gallo de Romero, atendiendo dos grados y dos secciones. En el año 1978, se presentaron los maestros Juan de Jesús Fúnez Santos y Priscila Bustillo Zelaya, para ocupar los cargos de director y subdirectora.

En 1979 se incrementó la matrícula hasta el tercer grado, ocupando dicha plaza el maestro Walter Inestroza. Fue a partir de ese año, y debido al espacio insuficiente para atender a la población estudiantil, ya que solo se contaba con dos aulas, los maestros se ven obligados a alquilar casas particulares para habilitarlas como aulas escolares. Fue hasta el año 1987 que se construyó el nuevo edificio por parte de la Corporación Municipal, presidida en ese entonces por la señora Yolany Zúniga.

A partir del año 2008 funciona como Centro de Educación Básica (CEB) alcanzando una matrícula de casi 600 estudiantes, incluyendo los 9 grados.  Hasta la fecha se ha mantenido el mismo director, profesor Juan de Jesús Fúnez, quien próximamente recibirá su tan merecida jubilación.  

El pasado 11 de abril este prestigioso Centro Básico cumplió 48 años de existencia, formando y educando a la población de El Ocote, municipio de Campamento, departamento de Olancho.  Docentes y estudiantes celebraron ese día con diferentes actividades deportivas y recreativas.

Perfil del centro educativo

  • Centro de prestigio
  • Instalaciones pedagógicas adecuadas
  • Personal capacitado con formación universitaria
  • Puntualidad y responsabilidad docente
  • Personal con actitud comprometida al cambio
  • Dirección con visión y gestión administrativa
  • Ambiente agradable
  • Estructura organizada
  • Convivencia armónica entre los actores educativos
  • Excelentes relaciones con los padres de familia y apoyo incondicional
  • Una matrícula consolida
  • Educación de calidad, incluyendo inglés y tecnología
  • Coordinador pedagógico para el III ciclo
  • Consejería  
  • Sala de computación
  • Seguridad de la población estudiantil
  • Personal con dominio de nuevas tecnologías
  • Tecnología disponible
  • Cumplimiento con más de 200 días de clases
  • Centro de prácticas profesionales de diferentes universidades
  • Demanda permanente de matrícula

CEB ALFONSO GUILLÉN ZELAYA

CATACAMAS

Con la creación del proyecto de la Colonia Agrícola y la llegada de familias de otras partes del país, la comunidad creció rápidamente, alcanzando una población de unas 100 a 150 personas. Esta expansión hizo necesario establecer un centro escolar, que comenzó a funcionar en 1952 en casas particulares que prestaban sus salones para impartir educación a los hijos de los nuevos residentes. En sus primeros años, la escuela operó en varias casas debido a la falta de un edificio adecuado. Personas como Don José Galo y Don Lucio Escobar ofrecieron sus hogares para que la escuela, que entonces se llamó Alfonso Guillén Zelaya en honor al ilustre poeta hondureño, pudiera funcionar. Las profesoras María Pereira y Gumersinda Madrid atendieron a los primeros alumnos, y el gobierno proporcionó una variedad de libros de texto para asegurar un funcionamiento óptimo. 

Durante el período de la Junta Militar, se construyeron dos aulas de ladrillo en el predio cívico, un área destinada para educación, negocios y recreación de la comunidad. La comunidad trabajó arduamente para levantar las paredes de otras cuatro aulas, aunque la falta de presupuesto impidió su finalización. Las profesoras María Luisa Díaz y Eva Sánchez comenzaron a trabajar en estas aulas, atendiendo a un número creciente de estudiantes. 

En 1992, la institución fue remodelada, añadiendo una oficina administrativa, un complejo sanitario y habilitando dos aulas adicionales. Durante este periodo, el director del centro era el profesor Rigoberto Bados. Posteriormente, con la ayuda de los gobiernos municipales y el esfuerzo de los padres de familia, se construyeron dos aulas más para acomodar el creciente número de estudiantes. Dado que la comunidad es el centro de unas 11 comunidades agrícolas, se consideró necesario convertir la escuela en un Centro de Educación Básica de nueve grados para atender a los alumnos que no podían continuar sus estudios en Catacamas. En 2000, se gestionó esta conversión, y en 2001 la institución comenzó a operar bajo la nueva modalidad, con la primera promoción de noveno grado egresando en 2003. 

En 2005, los padres de familia construyeron un aula adicional con su propio esfuerzo. Durante el gobierno del presidente José Manuel Zelaya Rosales en 2006, se construyó la segunda parte del complejo educativo, que incluyó cuatro aulas modernas, seis servicios sanitarios y un pozo séptico, con la colaboración del FHIS y la alcaldía municipal de Catacamas. También se construyó un aula tecnológica equipada con computadoras y otros recursos, bajo la dirección del profesor Rigoberto Bados. 

En 2010, se construyó la parte frontal del muro perimetral del centro educativo con fondos del servicio social aportados por los alumnos de noveno grado y la ayuda de los padres de familia. En 2012, el profesor Rigoberto Bados se jubiló, y el profesor Nicolás Turcios fue nombrado director, aunque su periodo estuvo marcado por conflictos y fue sustituido en 2014 por la Licenciada Karen Yolany Salmerón Gálvez. Desde su incorporación, la Licenciada Salmerón Gálvez ha logrado importantes mejoras administrativas, académicas y de infraestructura, incluyendo la modernización de las aulas originales. 

En 2015, el centro contaba con 257 estudiantes y un equipo de docentes dedicados. En los años siguientes, se realizaron diversas mejoras, como la construcción del muro perimetral posterior, la incorporación de nuevas aulas y la modernización de las instalaciones tecnológicas. La pandemia de COVID-19 en 2020 y 2021 impuso desafíos, pero el centro continuó con la educación virtual y semipresencial. En 2022, con el regreso a la normalidad, se inició la construcción de un nuevo salón de clases para atender al aumento de matrícula. En 2023, se realizaron nuevos nombramientos y mejoras en la infraestructura, incluyendo una nueva cafetería y un escenario para eventos especiales. 

Actualmente, el C.E.B. “Alfonso Guillén Zelaya” cuenta con 13 docentes que imparten diversos espacios curriculares, y continúa creciendo y desarrollándose para ofrecer una educación de calidad a la comunidad.