Las artesanías en Honduras representan la cultura y el talento de muchos pueblos alrededor del país. La artesanía no solo es una parte fundamental de la identidad hondureña, sino también un medio para preservar las tradiciones y las habilidades ancestrales en la creación de hermosas piezas elaboradas a mano que perduran a lo largo de los años.
Gerardo Garay viene de una familia de artesanos, desde pequeño observaba trabajar a su padre e inspirado por el arte de su progenitor, decidió dedicarse a crear obras únicas y especiales para embellecer los hogares hondureños.
“El material que utilizamos es barro y el tipo de artesanías que nosotros hacemos es más de adorno, de decoración, porque hay artesanía utilitaria, que es la antigua, la que siempre se ha hecho, pero no, nosotros solo hacemos para decorar casa”, mencionó Gerardo Garay, artesano.
El municipio de Ojojona, ubicado en el departamento de Francisco Morazán, es la cuna de la artesanía de barro, materia prima que es extraída de las montañas que se encuentran alrededor de los pueblos y seleccionada minuciosamente para poder crear adornos que destacan en cada casa del Honduras.
“Primero es el proceso de extracción del barro, que es clasificarlo, no es cualquier barro, como la tierra. Lo clasificamos, vemos que nos de para lo que queremos elaborar. Lo traemos, lo preparamos, después de preparado lo pasamos acá, al torno o molde, porque hay torno o molde y empezamos a fabricar la pieza. Y la pieza, debemos esperar tiempo de endurecido, le llamamos nosotros para decorar, después lo secamos a sombra y a solo y luego pasa al fuego, al horno”.
Ojojona es un pueblo de origen Lenca, fundado hace más de 400 años y considerado patrimonio cultural del país debido a toda la historia que recoge. Cuenta con atractivos como estas artesanías elaboradas a mano con barro negro, único en Honduras.
“Es un buen patrimonio, lo que le puedo agregar es que es un buen patrimonio porque, la verdad que de aquí, de este patrimonio, muchas personas aquí en Ojojona hemos logrado tener nuestro empleo y no nos toca salir fuera”, agregó Gerardo Garay.
Este lugar está ubicado a 30 minutos de la capital que nos ofrece arte, cultura, historia y naturaleza.