Los Desfiles Patrios son nuestra cultura, nuestra manera de expresar el amor por Honduras. Este año, las calles de todo el país fueron testigo del fervor patrio y el civismo que nos representan como hondureños.
Desde las primeras horas de la mañana, estudiantes de todos los niveles educativos se congregaron para rendir tributo a nuestra independencia. Las bandas de guerra marcaron el paso de cada institución, mientras el público aplaudía con orgullo cada presentación.
Las calles se llenaron de color y tradición. Cuadros artísticos, bailes folclóricos, poesía y dramatizaciones recordaron nuestra historia y a los héroes que nos dieron patria. Cada acto fue una muestra de identidad y un recordatorio de que somos un país libre, soberano e independiente.
La participación de las familias fue clave para dar mayor realce a la jornada. Niños, jóvenes y adultos se unieron en un mismo sentimiento de orgullo, fortaleciendo la unión y el espíritu de nación.
Los Desfiles Patrios son más que un acto conmemorativo: son un encuentro con nuestras raíces, una oportunidad para reforzar los valores de respeto, disciplina y amor a Honduras. Así, con civismo y alegría, la población celebró 204 años de independencia, demostrando que el espíritu catracho sigue vivo en cada rincón del país.