La conmemoración del bicentenario no puede quedar reducida, por importante que ello sea, a una revisión histórica de los acontecimientos pasados, sino que debe plantearse como un compromiso colectivo para enfrentarse a los retos y desafíos actuales de los pueblos, especialmente en la educación.
El Licenciado y M. Sc Arnulfo Ramírez de La Costa, nos habla sobre este tema y nos comparte que uno de los desafíos es apuntar a las personas que van interactuar con los estudiantes y van a dar nuevos conocimientos, esto es fundamental, ya que otras cosas, se quedaran ahí son importantes pero lo más importante es el acercamiento de estos “seres humanos con otros seres humanos llamados estudiantes.”
"La educación es uno de los problemas fundamentales no solo de Honduras, ni de Centroamérica sino de América Latina, hay cambios que, si se dan, a niveles de programas, estructuras, de edificios, pero los cambios tienen que darse desde la parte humana. Es decir, los docentes que son los que van interactuar con los estudiantes, esto es fundamental"
Arnulfo Ramírez de la Costa
Historiador
Realmente la educación si hacemos una visión haya por 1821 a la actualidad, si podemos ver que hay cambios, se requiere potenciar más, ese aspecto de la educación. Porque se ve más la parte económica, política y social que es importante, pero hemos dejado a un lado la educación. “Porque es la educación la que va sacar adelante a todos los países.”
El Licenciado de La Costa, nos manifestó que uno de los retos más grande que tendría Honduras en el sentido educativo seria “ apuntar, enfatizar y priorizar a los que están impartiendo este conocimiento a los docentes, es decir a ellos para poderlos potenciar y hacerles ver cuál es el papel fundamental de ellos ,recordarles el papel de ellos que no solo es de dar conocimientos, sino también hay una formación y también una información, transformar a esta nueva juventud es el rol fundamental para seguir adelante en nuestro país.
“creo que este bicentenario puede ser nuestro punto de partida, nuestro punto de reflexión o como unos le llaman el punto de quiebre para que realmente pensemos, pero pensemos bien hacia donde vamos, porque un país que no sabe hacia dónde va sin rumbo o le van imprimir un nuevo rumbo”.
Arnulfo Ramírez de la Costa
Historiador