El sarampión es una de las enfermedades virales más contagiosas que existen, transmitida por el aire a través de la tos y los estornudos. Puede ocasionar fiebre alta, sarpullido, complicaciones respiratorias, diarrea grave, neumonía e incluso la muerte, especialmente en niñas y niños pequeños.
La forma más efectiva de prevenir el sarampión es la vacunación. La vacuna contra el sarampión es segura, gratuita y está disponible en los centros de salud. Se aplica en dos dosis:
Primera dosis: a los 12 meses de edad.
Segunda dosis (refuerzo): entre los 4 y 6 años.
Recibir ambas dosis garantiza una protección casi total contra la enfermedad.